Peleando Limpio – Herramienta para comunicarte mejor.

Uno de los mantras en poliamor es “comunicación, comunicación, comunicación”. Suena obvio y muy sencillo pero la realidad es que nos enseñan a hablar pero rara vez nos enseñan a comunicarnos.

Veamos un ejemplo a ver si te suena familiar:

A: ¿No sacaste a los perros en la mañana?

B: No. Siempre los sacas tú.

A: Claro, si yo no lo hago no se hace. Nunca me apoyas.

B: Eres un exagerado. Yo tengo muchas cosas qué hacer, no entiendo por qué no puedes manejar algo tan simple como sacar a los perros. Además, uno es tuyo.

A: ¿O sea que lo que yo hago no es importante? Uy, ¡perdón! Siempre es lo mismo contigo.

En una conferencia que di hace unos días, expliqué que discusiones como el ejemplo anterior son intentos de resolver conflictos y vienen de un lugar de mucho amor y ganas de cuidar la relación. Por supuesto, todos hacemos lo que podemos con las herramientas que tenemos.

Desmenuzando el conflicto

Antes de pasar a la herramienta de resolución, veamos cómo es esta que todos traemos.

Tanto A como B tienen una necesidad y una petición. ¿Puedes identificar cuál es? A está pidiendo apoyo y B está pidiendo espacio. Claro, ninguno de los dos está siendo claro y, al sentirse frustrados, la situación rápidamente escala a utilizar palabras peligrosas como siempre y nunca.

No son ganas de fregar, hay una intención de conexión y afecto detrás del diálogo. Sólo está muy escondida.

Peleando limpio

Multiamory.com tiene varias herramientas de comunicación muy efectivas. Una de mis favoritas funciona así:

A: Veo a los perros inquietos y creo que no han salido aún. Me siento incómodo ya que tienen que salir y me siento muy cansado. ¿Podrías sacarlos hoy?

En el primer ejemplo, A asume que su petición está clara y se enfada cuando no es atendida. Además, se siente atacado y reacciona con más ataques.

Por otro lado, en el ejemplo de esta sección se está practicando la comunicación no violenta. Puede parecer sencillo pero hace toda la diferencia. Funciona así:

  1. Describir el suceso de la manera más objetiva posible (sin incluir sentimientos ni juicios). Ejemplo: «Cuando salimos de casa y caminamos, estabas unos pasos adelante de mí». NO «Cuando salimos de casa me ignoraste y no me tomaste de la mano como siempre«.
  2. Describir cómo te sientes con esa situación sin incluir acciones que haya hecho la otra persona. Ejemplo: «Me sentí triste porque me gusta caminar junto a ti y tomar tu mano». NO «Me hiciste sentir triste porque no me tomaste de la mano«.
  3. Expresa tu necesidad. Ejemplo: «Necesito sentirme cerca de ti.»
  4. Expresar una petición abierta y flexible. Ejemplo: «¿Me podrías ayudar a encontrar una manera de hacerte saber cuando esto pase para poder resolverlo?». NO «Tómame de la mano siempre para que no me sienta mal«.

¡Pro-tip!

Hay que tomar en cuenta los siguientes puntos:

  1. Si te sientes demasiado enojado, hambriento, cansado o solo, ¡detente! Tómate un tiempo antes de iniciar la conversación. Estas sensaciones fisiológicas tienden a anular la efectividad de la técnica.
  2. Habla de ti. No es lo que la persona te hizo a ti sino cómo te sentiste con lo que sucedió.
  3. Cuidado con los ataques y juicios disfrazados de sentimientos. Decir «me hiciste sentir mal» es un ataque, «me sentí mal cuando pasó esto» es una descripción.
  4. Las peticiones no son exigencias. Si le pides algo a alguien, esa persona está en toda la libertad de negarse… Y ESTÁ BIEN. Por eso las peticiones se dejan abiertas para que la otra persona pueda buscar una forma que le sea efectiva para ayudar. Una exigencia implica que la persona debe aceptar o lidiar con consecuencias poco agradables y a eso le llamamos coerción.

¡Practica!

La comunicación no violenta no es algo que nos enseñen a todos desde pequeños. Al principio requiere tomarte unos minutos y realmente pensar en lo que estás diciendo. Toma tiempo pero eventualmente se volverá tan natural para ti como reclamarle a tu pareja por qué no lava los platos (o más, espero).

Para empezar, ¿puedes identificar la forma no violenta para la respuesta de B en el ejemplo de arriba?

¿Y si mi pareja no sabe hacerlo?

Lo ideal es que todos los miembros del conflicto puedan utilizar esta herramienta para maximizar los resultados. Sin embargo, con que una persona sea capaz de llevar esto a cabo, el conflicto se volverá más llevadero y será más fácil resolverlo de la mejor forma.

Si te interesa aprender herramientas de comunicación en pareja y resolución positiva de conflictos, pronto estaré ofreciendo talleres en esos temas. ¡Sígueme en Instagram y Facebook para que no se te pasen!

Desenredándote en una relación codependiente sin soltar a tu pareja.

«Y, ¿cómo empiezo?» es de las preguntas que más frecuentemente escucho cuando alguien se interesa por entrar al poliamor. Es común pensar que lo más importante es asegurarte de que no tengas celos o de que tu relación esté lo suficientemente sólida para resistir el cambio.

Resulta que no es eso.

El paso que más nos saltamos cuando abrimos una relación

Recientemente me compartieron un artículo escrito por Polyamory School acerca de este tema precisamente. Entre todo lo que comentan, me gustaría empezar con tres lecciones que consideran debemos aprender:

  1. Aún si tengo tiempo solo, sigo siendo amado.
  2. No voy a hacerme bolita y morirme porque me dejan solo.
  3. Tener vidas individuales nos hace personas más interesantes y eso refuerza nuestra relación.

Para aquellos de nosotros que empezamos desde una relación monógama o que simplemente no conocemos otras formas de relacionarnos, es muy fácil enredarnos en nuestras relaciones de pareja. Según Polyamory School, la monogamia es un suelo muy fértil para sembrar codependencia. ¿Está mal? No. ¿Sirve para ser poli? Tampoco.

De codependencia, romance y vidas fusionadas

Para muestra, un botón. En la relación que tengo con mi pareja (con quien vivo), hemos dormido separados un total de ocho veces en casi seis años. Nos hemos bañado separados menos de quince. Siempre me ha parecido increíblemente romántico ya que para mí eso demostraba todo el interés y la necesidad que teníamos de estar juntos.

Para algunos de ustedes, eso puede ser algo espeluznante. Habrá quien diga de manera experta y elocuente «eso es un claro signo de codependencia«.

Siempre he pensado que en las relaciones humanas todo se vale siempre y cuando todos los involucrados den su consentimiento informado y no haya ningún tipo de coerción. Habemos quienes disfrutamos mucho de vidas fusionadas y habrá quien necesite mantener esferas privadas e independientes. Ninguna es mejor porque todos tenemos necesidades diferentes.

El punto está en que esto debe ser flexible. Cuando se empieza una relación poliamorosa, hay que saber que es imposible tener una relación tan enredada. Hay que dejar algunos hilos para los vínculos que se vayan agregando.

Guía paso a paso

En poliamor y en las relaciones humanas no hay guías paso a paso que sean efectivas para todos siempre. Dicho eso, el artículo de Polyamory School tiene una propuesta maravillosa que, si bien no es una panacea, considero extremadamente útil.

Para desenredarte antes de abrir tu relación, puedes hacer lo siguiente:

Paso 1: Elige una noche y vete.

Cada uno de ustedes debe elegir una noche específica de la semana para salir. Las condiciones son que no pueden ir juntos y no pueden elegir la misma noche. Por el momento, limítate a actividades lúdicas que no incluyan salir con alguien románticamente. Puedes ir al cine, a tomar un café, al karaoke, al teatro o a caminar. Si esto es fácil o después de hacerlo algunas veces, intenta no preguntarle a dónde va hasta que regrese.

Paso 2: Cambia a una noche al azar

Igual y hasta un día del fin de semana. Por el momento, ¡aún no hagas citas románticas! Esto ayuda a que se vayan acostumbrando a pasar tiempo separados sin que eso amenace su relación o su intimidad.

Paso 3: Invítense a tener citas

Ahora que hay noches en las que cada uno de ustedes tiene tiempo para sí mismo, se deja de obviar que pasarán tiempo juntos. Las noches de rutina donde van de cenar a ver Netflix a la cama a dormir se están volviendo más esporádicas y es posible que haya cosas que quieran compartir. Tal vez en una de tus salidas encontraste un lugar que sabes que le gustaría a tu pareja… ¡invítalo a salir! Pregúntale qué día le queda mejor y hagan un plan. Ya no es un «ah, el viernes vamos a hacer esto» sino «me gustaría salir contigo el viernes, ¿cómo ves?».

Esto es un gran cambio. Ya no asumen que estarán juntos y su tiempo se vuelve más intencional y de calidad.

Paso 4: Ahora Y SÓLO AHORA salgan con otras personas en plan romántico

Vayan lento. Esto es un proceso que debería tomar varias semanas. Tómense su tiempo que nadie los está correteando. Puede ser empezar con una noche a la semana para salir con alguien y después de un par de meses empezar a incrementar el número.

Ojo! Esto sólo es una guía y recuerden que las personas en la relación son más importantes que los acuerdos y la relación en sí. Hay que comunicarse mucho y platicar cada paso que se da. Es válido regresarse un paso o poner pausa al proceso. Todo es válido siempre y cuando todos los integrantes estén de acuerdo.

Dos individuos compartiendo su vida

En pocas palabras, volver a ser personas independientes puede abrir un mundo completamente nuevo para su relación. Esa persona que conociste, independiente de ti, es de la que te enamoraste. Es hermoso compartir una vida, un espacio y planes – es hermoso poder hacerlo con otra persona que tiene cosas que aportar y compartirte.

School, P. (2017, June 27). The Most Skipped Step When Opening a Relationship. Retrieved October 15, 2019, from https://medium.com/@PolyamorySchool/the-most-skipped-step-when-opening-a-relationship-f1f67abbbd49?sfns=mo.